Nos dio un cielo azul y puro y lo volvimos gris y sucio.
Nos dio una tierra fértil y noble y ahora ya no sirve a nadie.
Los ríos corrían alegremente y ahora solo llevan muerte
y ni los animales se escapan de esta suerte.
Además me pregunto con mucha preocupación,
¿Y que pasará en el mañana?, si el ahora es solo destrucción?
¿Será posible que todo cambie y que el sol vuelva a brillar, con su misma intensidad.
Esto me hizo reflexionar y empecé a imaginar
que el ritmo de este mundo parece que no para, parece que ya no es posible
pensar en un mundo limpio y puro y que a los que vienen les toca nuestro daño.
No tiene que ser así, podemos preguntar:
¿Y que pasará en el mañana, si el ahora es solo destrucción.
No dejemos que el mundo se acabe. En nuestras manos está el nuevo día,
que ya pronto llegará.
Empecemos pues a cambiar, recordar que Dios nos dio este mundo,
y lo debemos salvar, lo que pasará esta en nuestras manos.
si algo hay que cambiar , esta en tus manos y en las mías, en las manos de todos
¿Que pasa es hora de cambiar. Nadie lo hará por ti,. ¿Y si no lo haces, que pasará?
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